La empresa presentó su Declaración de Impacto Ambiental, que asegura la continuidad operativa hasta 2029 y proyecta más de 630 empleos en su construcción.

Minera El Abra, filial de Freeport-McMoRan, dio un paso estratégico al presentar al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) su Declaración de Impacto Ambiental (DIA) para el proyecto “Modificación Pila de Lixiviación Sulfolix”. Con una inversión proyectada de US$741 millones, esta iniciativa busca optimizar las operaciones a corto plazo, ampliando la pila de lixiviación permanente y mejorando la recuperación de cobre.

El proyecto, que no modifica la tasa de extracción ni la producción minera, mantendrá la fuente y el caudal de agua utilizados actualmente. La vida útil del yacimiento se extenderá hasta 2029, consolidando a El Abra como un actor clave en la minería chilena.

Impacto económico y social

Durante los 30 meses estimados para la construcción, se generarán más de 630 nuevos empleos, reafirmando el compromiso de la minera con el desarrollo local y la creación de valor compartido. Este proyecto no solo optimiza las operaciones actuales, sino que pavimenta el camino para la expansión futura de El Abra.

Mario Larenas, Country Manager de Freeport-McMoRan en Chile, subrayó la relevancia del proyecto: “Estamos dando un paso significativo con este ingreso al SEIA. Esto no solo nos permite optimizar nuestras operaciones, sino también trabajar en un diseño que asegure la continuidad productiva más allá de 2029”.

Visión de futuro

El Abra también está desarrollando un ambicioso plan de expansión, que incluirá una planta concentradora y una desaladora. Se espera que el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de este proyecto sea presentado a evaluación a fines de 2025, asegurando la sostenibilidad a largo plazo.

Con iniciativas como esta, Minera El Abra reafirma su compromiso con la minería sostenible y el desarrollo económico regional, posicionándose como un referente en el sector.