
El astrónomo chileno llama al Gobierno a proteger el observatorio astronómico más importante del mundo ante los riesgos del proyecto de AES Chile.
El Dr. José Maza, Premio Nacional de Ciencias Exactas en 1999, lanzó un enérgico llamado para proteger el Observatorio Paranal, ubicado en el desierto de Atacama. Este centro astronómico, reconocido mundialmente por sus condiciones únicas, enfrenta una grave amenaza debido al megaproyecto energético INNA, impulsado por AES Chile.
Un llamado a la acción
El astrónomo chileno, conocido por sus investigaciones en supernovas y energía oscura, instó a la ciudadanía a actuar frente al riesgo que representa este proyecto industrial. «Por favor, todos y todas le pidan al Gobierno que no permita el emplazamiento de este proyecto», expresó Maza, apelando directamente a las autoridades y a la población.
El proyecto INNA planea producir hidrógeno y amoníaco verde utilizando energía solar y eólica, pero su instalación a solo siete kilómetros de Paranal podría comprometer la calidad de las observaciones astronómicas. Según Maza, las turbinas eólicas y otras infraestructuras asociadas generarían contaminación lumínica y turbulencias que afectarían los telescopios, entre ellos el Very Large Telescope (VLT) y el futuro Extremely Large Telescope (ELT).
Paranal: Ciencia bajo amenaza
El Observatorio Paranal, un orgullo nacional y un recurso invaluable para la astronomía mundial, se encuentra en una de las zonas más oscuras del planeta, esencial para el estudio del universo. «Chile debe liderar en energías renovables, pero no a costa de sacrificar un patrimonio científico único», enfatizó Maza.
El futuro está en juego
José Maza destacó la importancia de equilibrar el desarrollo industrial con la conservación del cielo nocturno y advirtió que la ubicación del proyecto INNA amenaza con destruir estas condiciones excepcionales. «Paranal es el mejor lugar del mundo para la astronomía, y no podemos permitir que este proyecto lo ponga en riesgo», afirmó.
El mensaje del astrónomo es claro: proteger Paranal no solo es una responsabilidad nacional, sino también un compromiso global. «Por favor, no matemos lo que nos hace excepcionales. Paranal es único, y debemos preservarlo para las futuras generaciones», concluyó.